Publicado 15 de marzo de 2024 en Interés, Padres por Nutesa Blog
El bullying escolar es un problema grave que afecta a millones de estudiantes en todo el mundo. Más que simples bromas o conflictos entre compañeros, las consecuencias del bullying son profundas y duraderas para quienes lo experimentan.
Según el informe Violencia en las escuelas: una lección diaria (UNICEF, 2018), alrededor de 150 millones de escolares, entre los 13 y 15 años de todo el mundo, ha sufrido maltrato en las escuelas o en sus inmediaciones.
Desde problemas emocionales hasta dificultades académicas, estas son algunas de las repercusiones más comunes del bullying en los escolares:
El acoso escolar puede tener un impacto devastador en la salud mental de los estudiantes. Las víctimas de bullying -a menudo- experimentan ansiedad, depresión, baja autoestima y sentimientos de soledad. Estos problemas emocionales pueden persistir a lo largo de la vida si no se abordan adecuadamente, afectando las relaciones interpersonales y la calidad de vida.
De acuerdo con Horacio Vargas Murga, director ejecutivo de la Dirección Ejecutiva de Niños y Adolescentes del Instituto Nacional de Salud Mental “Honorio Delgado – Hideyo Noguchi”, los niños que son víctimas de bullying presentar pensamientos suicidas. Además, de adulto, puede ser vulnerable a otros acosos.
Otra de las consecuencias del bullying es que puede afectar el rendimiento académico de los estudiantes. Las víctimas suelen experimentar dificultades para concentrarse en clase, lo que puede llevar a un bajo desempeño académico y a la falta de interés en la escuela. Además, el miedo constante puede hacer que eviten el colegio o falten a clases, lo que interfiere aún más con su aprendizaje.
Un informe del Instituto de Estudios Educativos y Sociales de la OCDE encontró que el acoso escolar está asociado con un rendimiento académico más bajo y una mayor probabilidad de abandono escolar.
El bullying puede dificultar el establecimiento de relaciones positivas entre los estudiantes. Las víctimas suelen experimentar dificultades para hacer amigos y confiar en otros. Además, el acoso escolar puede provocar aislamiento social, ya que las víctimas pueden temer acercarse a sus compañeros por miedo a ser ridiculizadas o maltratadas.
Investigadores de la Universidad de Warwick encontraron que el acoso escolar puede tener efectos duraderos en las relaciones sociales de los estudiantes, incluso en la adultez, afectando su capacidad para establecer vínculos afectivos y de confianza.
El bullying también puede tener repercusiones en la salud física de los estudiantes. El estrés crónico causado por el acoso escolar puede manifestarse en síntomas físicos como dolores de cabeza, problemas gastrointestinales y trastornos del sueño. Además, pueden experimentar un mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas, como enfermedades cardiovasculares, debido al impacto negativo en su bienestar emocional y mental.
Según un estudio publicado en la revista Pediatrics, el acoso escolar está asociado con un mayor riesgo de problemas de salud física, como dolores de cabeza y problemas gastrointestinales, en la adolescencia y la adultez.
El acoso escolar no es una parte normal del crecimiento. Tiene consecuencias graves y de largo alcance para los estudiantes que lo experimentan. Por ello, es fundamental que las escuelas, los padres y la sociedad en general trabajen juntos para prevenir y abordar el acoso escolar, brindando un entorno seguro y de apoyo para todos los estudiantes.